Vamos a aprovechar que hemos comprado medio salmón a buen precio para probar nuevas recetas, esta vez de un famoso cocinerín (por su tamaño). Como tenemos una planta de hierbabuena en casa, nos lo han puesto en bandeja.
Tiene que ser sano a más no poder y además ligerito, rápido y original. Ya sabes, antes “muetta que sensilla”.
- 200 gr de lomo de salmón
- Hojas de menta fresca (o hierbabuena)
- 1 cucharda de Aceite de Oliva Virgen 0,4º
- 3 cucharadas de Salsa de soja
- Zumo de medio limón
Cortar el salmón en láminas muy finas y disponer con gracia y estilo en una fuente alargada zen.
Por otro lado ponemos a calentar el aceite de oliva junto a la salsa de soja, más el zumo de medio limón sin pulpa ni pepitas. Para sacar el máximo zumo del limón (y de cualquier cítrico), lo ponemos medio minuto en el micro y lo exprimimos en cuanto no queme.
En el momento de servir, rociar la salsa por encima de los filetes, de manera que quede el contraste entre el frío del salmón y el calor de la salsa.
Poner una hoja de menta sobre cada filetito de salmón (me olvidé de sacar una foto).
Utilizar elegantemente unos palillos. Si esto lo ves difícil, ponte un babero y aduce que tú haces cualquier sacrificio con tal de respetar las tradiciones ancestrales.
Si no tienes babero, usa cubiertos occidentales, aduciendo que por encima de tu cadáver vas tú a hacer el ridículo, Macario Bendito.
Para acompañar, una ensalada de alga wakame, que ya vienen preparadas y aliñadas. O mejor todavía, nuestra Ensalada Wakame.
¡Una maravilla!
